Durante el periodo denominado Colonia, las distintas posesiones de España en América estaban divididas en virreinatos, gobernaciones y capitanías generales. Al momento de la independencia eran virreinatos México (Nueva España), Nueva Granada, Perú y Río de la Plata (Argentina). Las demás posesiones eran gobernaciones o capitanías generales, como Chile.
En realidad, es más correcto hablar de provincias o reinos que de colonias1ya que estos no eran propiedad de España sino de sus reyes, que veían sus posesiones en América de la misma forma que otras provincias o reinos como los que poseían en Europa (Castilla, Aragón, Nápoles, Flandes, Portugal, etc.). Es así como los reyes en su correspondencia usaban expresiones tales como “estos reinos” o “mis reinos”.
Primeros clamores de independencia
Fueron varias las causas por las que las posesiones hispanoamericanas quisieron emanciparse de la corona española. Las principales fueron:
– El ejemplo de la independencia de Estados Unidos (1776-1881). España y Francia, intranquilas por el creciente progreso de Inglaterra, apoyaron la independencia de las colonias inglesas sin pensar que aquello iba a influir poco después en la Revolución Francesa (1789) y la sublevación de las Colonias de España en América a partir de 1810.
– La invasión de Napoleón a España (1808) quien usurpó el trono a Fernando VII para instalar en él a su hermano José Bonaparte.
– La alarma por los intentos británicas de invasión al Río de la Plata.